Febrero 3 del 2025.-(EFE).-El gobierno de Corea del Norte rechazó las declaraciones del secretario de Estado de Estados Unidos, Marco Rubio, quien calificó al país asiático como un “Estado canalla”, considerándolo una grave provocación política y una muestra de la postura hostil de la nueva administración de Donald Trump.

A través de la agencia estatal KCNA, un funcionario de la Cancillería norcoreana acusó a Washington de intentar desprestigiar a un Estado soberano, asegurando que estas declaraciones no contribuirán a los intereses de Estados Unidos Pionyang advirtió que no tolerará provocaciones y que responderá con medidas firmes.

Por su parte, el portavoz del Ministerio de Unificación de Corea del Sur, Koo Byoung-sam, rechazó la postura de Pionyang, señalando que el verdadero responsable de vulnerar la paz y las normas internacionales es el régimen norcoreano. Además, reafirmó que Seúl y Washington mantienen su compromiso con la desnuclearización total de Corea del Norte.

Este enfrentamiento verbal marca la primera crítica directa del régimen de Kim Jong-un hacia la administración de Trump, quien recientemente expresó su intención de retomar el diálogo con Pionyang sobre el desarme nuclear, tras el fracaso de las negociaciones entre 2018 y 2019.

Además, KCNA publicó otro comunicado condenando el plan de defensa antimisiles de EE.UU., argumentando que busca justificar el incremento de su poder militar y la militarización del espacio con el objetivo de consolidar su hegemonía global.